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020			_a978-607-30-6832-1
040			_aSeMujeres CDMX _cSeMujeres CDMX
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082			_a305.42,I88,13
100			_aMéndez Cota, Gabriela. Cosio Barroso, Izchel _98818
245			_aGénero y gordofobia
260			_aMéxico : _bUniversidad Nacional Autónoma de México, Centro de Investigaciones y Estudios de Género, _c2022
300			_a21 p.
490			_aColección Itacate. Estudios de género y feminismos ; _v13
520			_aSe ha exigido un alto a la explotación económica de las personas gordas por parte de las industrias cosméticas, farmacéuticas y alimentarias, las integrantes del Fat Underground repudiaron la patologización de la gordura a manos de una ciencia mistificada y convocaron a la lucha colectiva, internacional y solidaria por una gordura libre. Mientras que para una buena parte del feminismo la gordura siguió siendo un trastorno, para el activismo gordo se trató desde el principio de emancipar la gordura de ese y cualquier otro significado cómplice del orden social. Esta divergencia resulta interesante por su capacidad específica y persistente para interrogar el sentido común capitalista y por las fructíferas intersecciones del pensamiento gordo con los estudios críticos del género, la racialización y el sexo, entre otros. Se enuncian brevemente varios estudios feministas sobre la gordura que se concentraron en cuestionar, en nombre de la liberación de las mujeres, las normas corporales de feminidad. Harjunen (2017) sugiere que los mandatos neoliberales de individualismo competitivo y el desempeño económico eficiente en todos los ámbitos de la vida social no solo explican la persistencia de la gordofobia, puesto que la gordura significa falta de eficiencia y competitividad, ya no se consideran como signos inequívocos de opresión, sino como acciones de un sujeto en proceso de autonomización o empoderamiento. El sanitarismo es un discurso que en consonancia con la racionalidad neoliberal hace de la salud una cuestión de responsabilidad económica y moral individual. Puede rastrearse en las políticas de salud pública, pero también en las referencias a la gordura en los diversos textos que conforman la cultura popular. Atender al género de la gordura permite esquivar las posiciones masculinistas y aceptar que la gordura no puede asimilarse a ningún activismo predicado en una noción de identidad natural o social. En cambio representa una auténtica amenaza al orden simbólico heteronormativo y reproductivista del capitalismo globalizado.
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