Sistematización actualizada sobre indicadores de violencia contra empleadas del hogar : y ¿cómo vamos?

La violencia no se limita a las grandes avenidas y los parques solitarios, los callejones oscuros y el transporte público. Para algunas empleadas del hogar, el lugar más inseguro es su propia casa. También recibe hostigamientos, discriminaciones y hasta violencia física en su ámbito laboral. Cada mujer empleada del hogar, tiene sus propios recursos, ha desarrollado capacidades, habilidades y ha generado prácticas para ponerlas en acción, que la constituyen como persona valiosa y capaz de pensar, sentir y actuar en forma autónoma, para hacerse cargo de su vida y encontrar un sentido propio de existencia. La conciencia de la autoestima permite que cada mujer visualice y valore sus propias capacidades y habilidades, las potencie y pueda compartirlas con otras personas, y recorrer procesos de aprender entre mujeres, unas de otras, en la medida que comparten la desvalorización social y también la experiencia de su valor social.