Es el cuarto tomo autobiográfico, tras "Memorias de una joven formal", "La plenitud de la vida" y "La fuerza de las cosas". Entre otras confesiones sobre su vida, Simone de Beauvoir, cuenta en esta publicación su relación con su hija adoptiva, Sylvie Le Bon de Beauvoir, una relación oscura: madre-hija, amistosa o amorosa... Dice que es un vínculo semejante al que la unía a su amiga Zaza,cincuenta años antes. Sylvie Le Bon se convertirá de esta manera en la heredera de su obra literaria y del conjunto de sus bienes
(1908-1986) SIMONE DE AUTOBIOGRAFIAS BEAUVOIR RELACIONES FAMILIARES