Minorías religiosas

México fue uno de los primeros países de América Latina en crear e implementar leyes que buscaban separar las actividades propias de la iglesia de aquellas que realiza el Estado, esta situación hizo eco hasta nuestros días a través del establecimiento, en la norma fundamental, de dos cuestiones esenciales: el derecho humano a la libertad religiosa y la laicidad. Diversas estadísticas y censos han señalado que la población de la Ciudad de México es predominantemente católica y que su influencia en diversas manifestaciones culturales asociadas con lo mexicano, muchas veces han mostrado intolerancia religiosa. La discriminación hacia practicantes de religiones y cultos diferentes está también relacionada con la xenofobia y la discriminación a inmigrantes. Los textos académicos que componen este libro logran materializar los datos, las cifras y los estudios académicos. Enseñan que sólo a través del conocimiento podemos erradicar la discriminación, que esta se sustenta, en la mayoría de las ocasiones, en la falta de comprensión del otro, de lo que es distinto. La historia religiosa en México es amplia y está marcada por diversos procesos sociales, como todo fenómeno humano, la religión se debe entender desde su proceso histórico, su contexto social, económico, político y cultural.